DE LA IDEA AL DISEÑO DE UN ESPACIO
La labor de un arquitecto desde tiempos remotos ha sido clave en la urbanización de las grandes ciudades, pero también cuando se habla de generar un impacto en el ser humano, por medio de sus creaciones. Y justamente una de las cuestionantes que se plantea un profesional de la arquitectura en todo momento es, ¿cómo desarrollar un concepto y convertirlo en un espacio para aportar a la calidad de vida y la experiencia diaria de una persona?
Como lo ha establecido la reconocida firma sevillana -Arquemo Arquitectos-, ¨cuando pensamos en un concepto arquitectónico, pensamos en una idea abstracta, una que no cambia a lo largo del proceso de diseño. Este no es necesariamente el caso, un concepto puede estar vinculado a muchos factores y puede evolucionar a medida que el diseño crece.
Los conceptos arquitectónicos son la forma en que los arquitectos respondemos a la situación de diseño que se nos presenta. Son un medio para traducir el problema de diseño no físico en el producto de construcción física. Cada proyecto tendrá problemas críticos, temas centrales o esencias problemáticas, y los problemas generales del diseño de un edificio pueden abordarse de varias maneras.¨
Son varias las áreas en las que el profesional debe enfocarse al momento de conceptualizar su idea, pues si bien es algo abstracto e intagible, se deben tomar en cuenta ciertos aspectos para facilitar el proceso de adecuación al diseño y poder llevar ese concepto a una realidad de mejor manera. Esta firma comenta que se toma en cuenta lo funcional, lo material, formal, colaborativo, contextual e, incluso, filosófico.
¨El concepto debe evolucionar junto con su análisis profundo del lugar. El desarrollo del concepto arquitectónico no debería ser lo primero que observe en el diseño. Es importante analizar regularmente la información del lugar y seguir sacando los problemas que se necesitan resolver para hacer un diseño exitoso.¨
Lo cierto es que los diferentes conceptos y soluciones, se descubrirán a medida que se vaya realizando el proceso de exploración de los diferentes aspectos requeridos en el diseño del proyecto y los valores e ideas que el profesional pueda aportar para hacer de una simple idea, un proyecto fuera de serie.
