Tecnología Anti-Crisis: Data analytics, la G en ASG.
Crisis es un estado casi permanente en Latinoamérica porque cuando no estamos ante una, estamos planeando para enfrentar una.
Los fenómenos macroeconómicos que han afectado al sector inmobiliario medioamericano (México y Centroamérica) tienen un contexto de ultraseparación de los recursos públicos y los privados en la lucha contra nuestras herencias neoliberales, poniendo a los desarrolladores y a la administración gubernamental, cada uno en un extremo diferente en el juego de jalar de la cuerda. Si, además, debajo de la cuerda la situación es de un mercado azotado por la crisis económica post-pandémica, con un poder adquisitivo reducido por la inflación y una desconfianza sobre las consecuencias de un endeudamiento, una recesión es exactamente lo que necesitamos.
Las recesiones son ajustes, es un error percibirlas como un accidente o una desgracia. Por supuesto que uno de sus efectos es el desbalance financiero, situación que nos distrae de la actividad importante en una recesión: reinventarnos.
La innovación ha sido el canal favorito de reinvención, pero un concepto tan ambiguo que su efecto no ha sido medible. La innovación por sí misma no significa un beneficio y por ello no debería ser un objetivo.
La trampa de la innovación
Innovar es cambiar la forma de hacer algo para hacerlo de una nueva manera. Esto nos ha llevado a grandes desperdicios del más valioso recurso: el tiempo. Hemos digitalizado la burocracia, tecnologizado los mismos procesos que hacíamos antes obteniendo el mismo resultado pero más costoso. Algo parecido a lo qué pasó con el CAD (Computer Assisted Design), logramos perpetuar un paradigma de trabajo que nos condenaba a la terrible ceguera que provoca la vista en dos dimensiones. Tardamos por lo menos 8200 años en cambiarlo por BIM (Building Information Modeling), no obstante el logro macrohistórico de relacionarnos del proyecto de una manera tridimensional, integrada y coordinada… el entregable termina siendo dibujos bidimensionales. Nuevamente, un objetivo definido por la inercia y no por el razonamiento.
La innovación se relaciona inmediatamente con tecnología y no tarda en aparecer la imagen de la inversión en software, hardware y capacitación que mágicamente va a solucionar el problema, aunque el problema no se haya delineado correctamente y el objetivo no esté en la solución sino en la herramienta que creemos que lo va a solucionar.
Esta psicología es muy común, inclusive en organizaciones con una madurez avanzada y una estructura corporativa bien organizada. Definir objetivos requiere de mucho trabajo de investigación, problematización y diseño de una solución, actividades que requieren de especialización y resulta más fácil importar objetivos de organizaciones similares. ¿Cuántas veces han escuchado “compramos X software y eso fue lo que terminó con el pasivo de mi empresa y lo que nos hizo cumplir todos nuestros objetivos de ASG”? yo se: nunca y nunca lo escucharán.
humano
Pareciera haber un mensaje constante de que la tecnología es la panacea y es muy probable que eso sea cierto. Tecnología se define por la metodología y la ética que aplicamos a las herramientas para cumplir un objetivo, lo que requiere una reflexión en reversa: ¿cuál es el objetivo? ¿Cuáles son los valores éticos en esos objetivos?, entonces, ¿qué herramientas son las adecuadas para hacer que en el cumplimento del objetivo, se garanticen los valores establecidos?
Ni planear, ni planear
Paradójicamente planear puede significar desarrollar un plan para lograr un objetivo y también quedarse quieto durante el vuelo y simplemente descender según las circunstancias aeronáuticas lo permitan. Ninguna de las alternativas ha resuelto problemáticas que nos lleven a conseguir objetivos. Ni planear como un ave que deja de mover sus alas y aprovecha las corrientes de aire para elevarse de vez en cuando, tampoco planear el desarrollo de pasos a seguir en el contexto de sucesos, factores y variables que no siempre podemos prever.
Establecer objetivos y generar estrategias para obtener métricas transparentes y automatizadas y así conocer las consecuencias de las decisiones o modificaciones que se dan sobre el proyecto, conocer la desviación o variaciones de los objetivos, constituye un conocimiento que nos permite, de verdad, controlar el destino del proyecto. A esto llamamos Business Intelligence, BI. Big Data interpretada en paneles de control diseñados para saber qué y porqué.
La estrategias de BI a través de Data Analytics requieren de la participación en el proceso de desarrollo del proyecto, junto con arquitectura, las ingenierías, el área de costos, programación y control de obra, de áreas que han estado desconectadas por mucho tiempo o que no están definidas claramente en las organizaciones actualmente como Risk Management.
No se inventaron los clavos porque ya teníamos martillos
La selección de las herramientas está llena de tentaciones. Lo importante es no exceder las funciones, reducir a una sola plataforma que acepte integraciones para evitar por completo y por sobre todas las cosas tener que hacer dos logins o tener más de un repositorio de información. Pocas reglas pero muy claras, una WBS Work Breakdown Structure para organizar los datos bien definida desde el principio con una administración pública y central.
La interpretación de los datos y su comportamiento para obtener indicadores puede cambiar tantas veces como sea necesario, sin embargo, la estructuración de la información debe hacerse desde el principio. Hacer modificaciones a la estructura de la información es costoso y riesgoso, además de que en términos de transparencia, es mejor no editar registros anteriores.
Ya sea la extracción de cuantificaciones de un modelo BIM, bases de datos de precios unitarios de contratistas concursantes, extracción de tablas de áreas del modelo o información de reportes de avance físico de la obra, la información requiere de una bitácora que guarde el registro de una manera auditable y segura. La mejor manera de no necesitar una auditoría es estar listo para una.
KISS Keep It Simple, Stupid.
La interoperabilidad siempre tiene consecuencias. Si generamos una búsqueda en internet sobre “herramientas para Business Intelligence” aparecerán numerosas opciones. Lo mejor será escoger una que se integre en la plataforma que ya usamos: un ERP, un CRM o, de preferencia un CDE. La combinación de MS Power BI con Autodesk BIM360 o con MS Teams tiene la ventaja de tener interfaces que conocemos y no integración transparente.
Saber porqué
Dependiendo de la escala del proyecto y otras variables, lo beneficios son diferentes, sin embargo, estudios desarrollados en los últimos 3 años demuestran que en preconstrucción y construcción se han logrado ahorros de entre 15 y 25% gracias a la aplicación de estrategias de Business Intelligence. Para operación y mantenimiento, esta cifra se eleva hasta el 75% de ahorros. Además de los beneficios de Valué Engineering, implementar la estructuración de la información en WBSs y el Data Analytics desde etapas tempranas de los proyectos, sienta bases transparentes el reporte en etapas de operación en que se pueden aplicar tecnologías más complejas como Digital Twins.
Con esta tecnología se conecta el mundo real con un, como su nombre lo dice, gemelo digital para una obtención automatizada de información.
Lo más relevante de los Digital Twins es la relación que generamos con la información. La relación visual, gráfica y tridimensional de la información constituye en si misma una herramienta para la interpretación correcta y transparente de la misma.
Es así que teniendo información que se genera de forma automática, podemos relacionar distintos conceptos para obtener indicadores. Con suficiente información histórica de estos indicadores, podremos hacer predicciones ensayando diferentes escenarios para prepararnos para las variables que no podemos controlar y para tomar las decisiones con la seguridad de que, ya que planear pueden ser un engaño, prever es nuestra gran arma secreta para enfrentar las crisis.
Fuente: Adela Rangel
